Puertas de la aldea

Como sannin que era y mano derecha del Raikage, no tardó mucho en llegar la noticia de que un nuevo Hokage se había investido así que era mi deber viajar hasta Konoha para mostrarle mis respetos y darle la enhorabuena. Así que cruce las puertas de la aldea para comenzar mi viaje hasta el pais del fuego así que me dirigí hacia el puerto del país del rayo para coger el primer ferri que zarpase mar adentro...

*Vaya... además se trata de un Uchiha, interesante.. muy interesante*

Después de hacer algunas cuantas cosas en casa me dirigí a las puertas de la aldea para realizar la misión que el raikage me había encomendado y encontrarme con la persona a la cual tendría que escoltar... Me eche mi mochila al hombro con algún par de cosas dentro para ir un poco liguera y que fuera rápido el viaje así que me dirigí a la entrada a esperar a el hombre que se suponía tenía que llevar a Kirigakure.

Ves a un tipo de aspecto obeso charlando con los guardias de la puerta bajo murmullos, de pronto se gira y te mira fijamente mientras se acerca poco a poco. Lleva unas gafas y barba descuidada

-¡Eh tu niñita! ¿Eres la enviada por el Raikage? pensaba que me tenía en mas alta estima...- dijo entre murmullos -Bueno no importa iremos por las montañas, el camino sera mas rapido aunque hay mas probabilidades de que caigamos en una emboscada, dime.. ¿No sera mucho para ti verdad?-

Llego a al puerta y que me encuentro... Un señor todo desaliñado y además..... Que se cree que no puedo... tsk ¿Qué se cree? -Que dijo?- me acerque a el mientras mi cabello y ojos cambiaban de color... -Repitalo si se atrebe- escuche el camino por el que íbamos pero no le icé mucho caso así que continúe -Esta es mi misión y nada me impedirá completarla entendió?...- le hise un gesto tosco... Para después calmarme -Mire no se sí es un gran amigo o nO de el Raikage pero si me confió esta misión a mi es por que puedo hacerlo - aunque siéndome franca no lo vi muy entusiasmado aunque francamente se veía que tenía mucho trabajo.

Logras impactarle aunque no ves reducido su mal humor -Mira guapita, solo te necesito para que me protejas. Limitate a molestarme lo menos posible- mientras el hombre empieza a caminar hacía la salida de la aldea haciendote una seña

-Venga vamos, ya hemos perdido suficiente tiempo-

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Al ver la puerta de madera y los guardias custodiándola me destape el rostro con una sonrisa en la boca -Sasuke ha vuelto!- los guardias al verme me abrieron la puerta mientras me daban la bienvenida de una forma efusiva y yo entre para volver definitivamente a casa...

*Hogar dulce hogar..*

Llegué rápidamente a las puertas pues me sabia el camino de memoria, antes de entrar salude a los guardias -Sasuke ha vuelto- tras mis breves palabras cruce las puertas y me adentre en Kumogakure *hogas, dulce hogar..*

La gente de Kumogakure me vitoreo hasta las puertas donde los guardias controlaban la gente que entraba y salía -Volveré para dar prosperidad a esta villa y entregaré el cuerpo de Rumanov al pueblo, ¡Larga vida a la nube!- y sin más salí de la aldea para dar caza a ese traidor asqueroso

Volví hacia mi aldea con el cuerpo inerte de Rumanov encima de mis hombros, el viaje se me hizo algo largo y pesado y estaba preparado para aceptar las suplicas de la aldea *Llego la hora de devolver la paz a esta aldea* pensé mientras iba caminando de camino a la aldea y cruce las puertas sin detenerme

-Este traidor no nos molestará mas!- grité mientras la gente me vitoreaba y todos nos íbamos dirigiendo a la plaza principal de Kumogakure